ExxonMobil adquiere productor de petróleo con un importante negocio de CCUS

ExxonMobil anunció que adquirirá Denbury, una empresa desarrolladora de soluciones de captura, utilización y almacenamiento de carbono (CCS) y recuperación mejorada de petróleo.

La adquisición es una transacción íntegramente en acciones valorada en 4.900 millones de dólares estadounidenses. Según los términos del acuerdo, los accionistas de Denbury recibirán 0,84 acciones de ExxonMobil por cada acción de Denbury.

“La adquisición de Denbury refleja nuestra determinación de hacer crecer de forma rentable nuestro negocio de Soluciones Bajas en Carbono, ofreciendo una amplia gama de soluciones integrales de captura y almacenamiento de carbono a diversos sectores con dificultades para la descarbonización”, declaró Darren Woods, presidente y director ejecutivo. “La amplitud de la red de Denbury, sumada a las décadas de experiencia y capacidades de ExxonMobil en CCS , nos brinda la oportunidad de desempeñar un papel aún más importante en una transición energética responsable, al tiempo que continuamos cumpliendo nuestro compromiso de proporcionar al mundo la energía y los productos esenciales que necesita”.

La adquisición de Denbury proporciona a ExxonMobil la mayor red de oleoductos de CO2 propia y operada en EE. UU., con 2.092 kilómetros (1.300 millas), incluyendo casi 1.490 kilómetros (925 millas) de oleoductos de CO2 en Luisiana, Texas y Misisipi, ubicados en uno de los mayores mercados de emisiones de CO2 de EE. UU., así como 10 emplazamientos de secuestro de carbono terrestres estratégicamente situados. Un sistema de transporte y almacenamiento rentable acelera el despliegue de la captura y almacenamiento de carbono (CAC) para ExxonMobil y clientes externos durante la próxima década y sustenta múltiples cadenas de valor bajas en carbono, incluyendo la CAC, el hidrógeno, el amoníaco, los biocombustibles y la captura directa de aire.

Chris Kendall, presidente y director ejecutivo de Denbury, afirmó que en los últimos años Denbury ha logrado avances significativos en la ejecución de sus operaciones de recuperación mejorada de petróleo y en el aprovechamiento de su infraestructura para acelerar el crecimiento de su negocio de transporte y almacenamiento de CO2.

“Para consolidar aún más este impulso positivo, el Consejo de Administración y el equipo directivo de Denbury llevaron a cabo un exhaustivo proceso de revisión y consideraron diversas alternativas para maximizar el valor a largo plazo”, declaró Kendall. “A través de este proceso, quedó claro que la transacción con ExxonMobil redunda en el mejor interés de nuestra empresa, nuestros accionistas y todos los grupos de interés de Denbury. Es importante destacar que, dado el importante capital y los años de trabajo necesarios para desarrollar plenamente nuestro negocio de CO2, ExxonMobil es el socio ideal, con amplios recursos y capacidades. La contraprestación íntegramente en acciones permitirá a los accionistas de Denbury participar en el potencial alcista de las acciones de ExxonMobil, beneficiándose a la vez de su sólida estrategia de retorno de capital. Esperamos con entusiasmo la integración de nuestras culturas y equipos, altamente complementarios, para materializar el valor y los beneficios a largo plazo de esta unión”.

“La infraestructura de CO2 de Denbury, con ventajas estratégicas, ofrece importantes oportunidades para expandir y acelerar el liderazgo de ExxonMobil en materia de bajas emisiones de carbono a lo largo de nuestras cadenas de valor en la Costa del Golfo”, declaró Dan Ammann, presidente de ExxonMobil Low Carbon Solutions . “Una vez desarrollada y optimizada por completo, esta combinación de activos y capacidades tiene el potencial de reducir de forma rentable las emisiones en más de 100 millones de toneladas métricas al año en una de las regiones con mayores emisiones de Estados Unidos”.

Además de los activos de captura y almacenamiento de carbono de Denbury, la adquisición incluye operaciones de petróleo y gas natural en la Costa del Golfo y las Montañas Rocosas. Estas operaciones cuentan con reservas probadas que suman más de 200 millones de barriles equivalentes de petróleo, con una producción actual de 47.000 barriles equivalentes de petróleo diarios, lo que proporciona flujo de caja operativo inmediato y opciones a corto plazo para la adquisición de CO2 y la ejecución del negocio de CCS.

Los consejos de administración de ambas compañías han aprobado por unanimidad la transacción , que está sujeta a las revisiones y aprobaciones regulatorias habituales. También está sujeta a la aprobación de los accionistas de Denbury. Se prevé que la transacción se cierre en el cuarto trimestre de 2023.